En verano, las personas pueden estar expuestas a una serie de enfermedades relacionadas con el clima cálido y húmedo, así como a las actividades que realizan durante esta temporada. Algunas de las enfermedades más comunes en verano son:
- Golpe de calor: el golpe de calor es una afección grave que puede ocurrir cuando el cuerpo se sobrecalienta y no puede regular su temperatura interna. Los síntomas incluyen sudoración excesiva, piel enrojecida, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, debilidad y confusión.
- Infecciones por alimentos: el calor aumenta el crecimiento de bacterias en los alimentos, lo que puede provocar infecciones por alimentos. Los síntomas incluyen náuseas, vómitos, diarrea y fiebre.
- Infecciones de la piel: las altas temperaturas y la humedad pueden favorecer la proliferación de hongos y bacterias en la piel, lo que puede provocar infecciones cutáneas como el pie de atleta, la tiña y las infecciones por estafilococos.
- Alergias: en verano, la exposición al polen y otros alérgenos puede provocar síntomas como estornudos, congestión nasal, picazón y ojos llorosos.
- Insolación: la insolación es una enfermedad relacionada con el calor que ocurre cuando el cuerpo pierde demasiado líquido y sales debido a la exposición prolongada al sol y el calor. Los síntomas incluyen mareos, náuseas, dolor de cabeza, piel enrojecida y sequedad de boca.
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